Es el Muscle Car de producción más potente hasta la fecha y uno de los autos más veloces en su categoría. Se trata del Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye Widebody 2019 o en otras palabras , la versión de producción regular más poderosa del Challenger. Este deportivo, que reconocerás por sus dos tomas de aire en el capó y aletas ensanchadas, entrega cifras de infarto gracias a sus 797 Hp (808 para el Demon con gasolina regular), el par motor queda en 958 Nm (707 lb-pie), con lo que este nuevo modelo se jacta de ser no sólo el Muscle Car, sino también el GT más potente y veloz del mercado. Obviamente también será el Challenger de más alto precio hasta hoy día.
Este es el Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye Widebody 2019
Después de que el que el challenger comenzó como un modelo 2008, Dodge agregó el hellcat en 2015 y el demon llegó como modelo 2018. Según la firma el Redeye es un Hellcat que ha sido poseído por el Demon. Será el deportivo perfecto para los entusiastas y el auto americano de producción más potente del mercado.
Hablemos de cifras. Este rey de poder nos deleita y asusta con sus 797 hp y 707 lb/pie de torque, con los que logra el 0 a 100 km en tan solo 3.4 segundos, el ¼ de milla en 10.8 segundos a 210 km/h, y una velocidad máxima de 326 km/h.
De donde salen estos números?. Fácil: De un radical motor V8 HEMI de 6.2 litros supercargado, derivado del Demon. Comparado con el motor Hellcat ‘convencional’, el motor del Redeye presume de nada menos que el supercargador tipo Roots más grande ofrecido en un vehículo de producción, pues desplaza 2.7 litros, frente a 2.4 del Hellcat ‘regular’.
Con esto, la presión de soplado llega hasta 14.5 psi, frente a las 11.6 psi del Hellcat ‘normal’. Esta es básicamente la razón principal del aumento de 90 hp, aunque claro, el Redeye hace uso de pistones y bielas reforzados, un tren de válvulas de alta velocidad, y sistemas de inyección y de lubricación mejorados, para hacer frente al incremento de boost.
Como es de esperarse, la potencia prodigiosa del Redeye trae consigo un consumo similar: con el pedal a fondo, el diabólico HEMI consume 5.4 litros de combustible por minuto, suficiente para vaciar el tanque en solo ¡11 minutos!, aunque en condiciones de manejo normal tiene un consumo en autopista homologado de 9.3 kilómetros por litro, que no está nada mal para un auto de 797 hp y más de 2 toneladas de peso. La responsable de dosificar todo este poder es una caja automática TorqueFlite 8HP90 de 8 velocidades con control manual secuencial.
Otros elementos adicionales procedentes del Challenger Demon que ayudan al Redeye a ser obscenamente rápido, son su sistema de ‘launch control’ con tecnología ‘Torque Reserve’, que le proporcionan hasta 3.9 psi de presión y un 55 por ciento más de torque al momento de la arrancada. Y claro, no podía faltar el ‘line lock’, que bloquea los frenos delanteros, haciendo que los brutales ‘burnouts’ de que es capaz este coche sean cosa prácticamente de rutina.
También está el enfriador ‘Power Chiller’, cuya función es desviar el refrigerante del aire acondicionado de la cabina a la unidad de enfriamiento para la carga de aire/combustible, que pasa a través de un radiador de baja temperatura en la defensa delantera, luego fluye a través del ‘Power Chiller’, donde el refrigerante lo enfría aún más, y después a través de un intercambiador de calor en la carcasa del supercargador, procurando que el aire que ingresa al motor esté lo más frío posible, para una mezcla más densa y, por ende, más potencia.
En contraste, el ‘After-Run Chiller’ funciona a la inversa: cuando el motor se apaga, el enfriador mantiene el ventilador del motor y la bomba de refrigerante del circuito de baja temperatura en funcionamiento para reducir la temperatura del supercargador, lo que ayuda a minimizar los efectos de absorción de calor. El conductor puede monitorear la temperatura del refrigerante en la pantalla táctil de 8.4” del tablero, y saber en tiempo real cuando el sobrealimentador está a la temperatura óptima.
Estas dos últimas funciones podrían parecer casi banales, pero su funcionamiento provee temperaturas de admisión hasta 7 grados centígrados más frías, que también es bastante significativo cuando hablamos de un motor y un supercargador de tales dimensiones, que generan mucho, pero MUCHO calor.
Además de la temperatura del compresor, en el sistema de infotenimiento del auto está disponible la aplicación ‘SRT Drive Modes’, que permite visualizar los tiempos de aceleración, fuerzas laterales y frenadas, así como configurar el comportamiento de la transmisión, dirección y suspensión. Adicional a esto, otra aplicación, llamada ‘Performance Pages’, proporciona información sobre el desempeño del vehículo en tiempo real, incluyendo fuerzas G, aceleraciones, medidores y rendimiento del motor. Estos datos pueden ser descargados a una memoria USB o tarjeta SD, con la idea de compartirlos con otros usuarios o simplemente mejorar los tiempos en pista.
Sí, tiempos en pista. Porque aunque suene difícil de creer, Dodge ha equipado a este auto con la mejor suspensión que ha visto esta ya longeva plataforma, con amortiguadores Bilstein adaptativos con 3 modos de manejo: ‘Auto’, ‘Sport’ y ‘Track’. Los rines de aluminio forjado –llamados ‘Devil’s Rim’, nos encanta- de 20” están envueltos en llantas Pirelli P ZERO de 305/35 ZR20 para ambos ejes, y detrás de ellos asoman frenos Brembo con discos de 15.4 pulgadas y calipers de 6 pistones en la parte delantera, mientras que en la parte posterior porta discos de 13.8 pulgadas y calipers de 4 pistones.
Con la llegada del Redeye, la gama del Dodge Challenger crece a cinco vehículos, una oferta bastante generosa para tratarse de un solo modelo: Challenger GT Dual Stripes, Challenger Scat Pack, Challenger SRT Hellcat, Challenger SRT Hellcat Widebody y Challenger SRT Hellcat Redeye Widebody.
- Precio
Para México el Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye Widebody 2019 tiene un precio de $1,744,900.
- Imágenes del Dodge Challenger SRT Hellcat Redeye Widebody 2019.