Para hoy les traemos otro de los carros eléctricos que tanto gustan. Se trata de un pequeño, liviano y eficiente modelo llamado McMurtry Spéirling, un supercoche que tiene tanta potencia y prestaciones que su uso está prohibido en las calles y solo se puede manejar en circuitos. No te dejes engañar por su tamaño. El equipo desarrollador de este interesante carro incluye antiguos ingenieros de diseño de la F1.
Este es el McMurtry Spéirling:
El Spéirling es un pequeño monoplaza con una carrocería de carbono que sólo mide 3,2 m de largo, 1,05 m de alto y 1,5 m de ancho, lo que le permite cortar el aire con mayor eficacia. Este singular deportivo fue ideado por Sir David McMurtry, un hombre de negocios e inventor con más de 200 patentes a su nombre.
El McMurtry Spéirling pesa unos 1.000 kilos, pese a contar con una enorme batería de 60 kilovatios hora. Según el fabricante, la relación peso/potencia es de 1/1, así que la diminuta máquina monta un motor cero emisiones de ¡1.000 caballos!
Con una velocidad máxima cercana a los 320 km/h, el Spéirling acelera de 0 a 300 km/h en nueve segundos, o en otras palabras el tiempo que un carro normal demora para llegar a los 100 km/.
Aunque alcanza semejante velocidad, el modelo inglés carece de alerones y deflectores como es característico en otros deportivos. Para lograr una eficiencia aerodinámica óptima los diseñadores colocaron un ventilador de 80 CV en la parte posterior.
Este sistema, utilizado alguna vez en la Fórmula 1 y en la extinta categoría Can-Am, extrae el aire que está debajo del coche. Así crea un vacío que, en este caso, equivale a una carga aerodinámica de 500 kilos. De esta manera, el auto va bien pegado al piso cuando anda a toda velocidad. Eso sí, cuenta con una “aleta de tiburón” que hace de estabilizador longitudinal.
Con una autonomía de 350 kilómetros, el Spéirling se queda sin energía después de 45 minutos en modo “racing”.
Un detalle importante: Mientras que la mayoría de los carros eléctricos son muy silenciosos, el sistema de ventiladores del Spéirling hace mucho ruido: 120 decibelios, similar al de una turbina de avión.
- Datos técnicos
•Chasis: Monocasco de carbono con batería integrada
•Suspensión: Multi-link
•Frenos: Carbono
•Llantas: 210/640 R-19 adelante y 240/640 R-19 atrás
•Tren motor: McMurtry AWD
•Relación: 1:1 (caballos por kilogramo)
•Potencia del ventilador: Más de 80 hp
•Capacidad de la batería: 60 kWh
•Sprint de 0-300 km/h: estimado en menos de 9 segundos
- Imágenes del McMurtry Spéirling.
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- McMurtry Spéirling: Para hoy les traemos otro de los carros eléctricos que tanto gustan. Se trata de un pequeño, liviano y eficiente modelo llamado McMurtry Spéirling, un supercoche que tiene tanta potencia y prestaciones que su uso está prohibido en las calles y solo se puede manejar en circuitos. No te dejes engañar por su tamaño. El equipo desarrollador de este interesante carro incluye antiguos ingenieros de diseño de la F1. ¿Qué precio pagaría por tener este exótico carro?
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- McMurtry Spéirling: El Spéirling es un pequeño monoplaza con una carrocería de carbono que sólo mide 3,2 m de largo, 1,05 m de alto y 1,5 m de ancho, lo que le permite cortar el aire con mayor eficacia. Este singular deportivo fue ideado por Sir David McMurtry, un hombre de negocios e inventor con más de 200 patentes a su nombre.
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- McMurtry Spéirling: Pesa unos 1.000 kilos, pese a contar con una enorme batería de 60 kilovatios hora. Según el fabricante, la relación peso/potencia es de 1/1, así que la diminuta máquina monta un motor cero emisiones de ¡1.000 caballos!. Con una velocidad máxima cercana a los 320 km/h, el Spéirling acelera de 0 a 300 km/h en nueve segundos, o en otras palabras el tiempo que un carro normal demora para llegar a los 100 km/h. ¿Qué precio pagaría por tener este exótico carro?
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- McMurtry Spéirling: Aunque alcanza semejante velocidad, el modelo inglés carece de alerones y deflectores como es característico en otros deportivos. Para lograr una eficiencia aerodinámica óptima los diseñadores colocaron un ventilador de 80 CV en la parte posterior. Este sistema, utilizado alguna vez en la Fórmula 1 y en la extinta categoría Can-Am, extrae el aire que está debajo del coche. Así crea un vacío que, en este caso, equivale a una carga aerodinámica de 500 kilos. De esta manera, el auto va bien pegado al piso cuando anda a toda velocidad. Eso sí, cuenta con una “aleta de tiburón” que hace de estabilizador longitudinal.
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- McMurtry Spéirling: Con una autonomía de 350 kilómetros, el Spéirling se queda sin energía después de 45 minutos en modo “racing”.
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- McMurtry Spéirling: Un detalle importante: Mientras que la mayoría de los carros eléctricos son muy silenciosos, el sistema de ventiladores del Spéirling hace mucho ruido: 120 decibelios, similar al de una turbina de avión.
