El Abarth 1000 SP es uno de los carros deportivos más célebres de la marca italiana y para celebrar su cumpleaños 55, la firma construyó un modelo one-off. Se trata de un prototipo único que recrea el concepto y la estética del auto original de 1966; pues la base mecánica tiene aspectos en común con el Alfa Romeo 4C.
Este es el Abarth 1000 SP:
Abarth es reconocida por ser la responsable de los modelos más deportivos y radicales de Fiat, pero tiempo atrás llegaron a ser una de las marcas más respetadas en el mundo de la competición en Europa, transformando modelos de Fiat y Alfa Romeo en campeones. Uno de los modelos más recordados de aquella gloriosa época fue el Abarth 1000 SP, un prototipo roadster de la década de los 60 con diseño de Bertone que compitió en la clase Sport Prototipo y que compitió en carreras de resistencia y subidas venciendo en pruebas como los 500 km de Nürburgring.
Ahora 55 años después de su estreno el Abarth 1000 SP ha resucitado en una sola unidad de la mano de Abarth y Centro Stile Fiat con esta reinterpretación moderna del clásico roadster de carreras que nace a partir del Alfa Romeo 4C Spider.
Originalmente, el auto fue construido por el ingeniero Mario Colucci, tomando como punto de partida el Fiat 600. Su nombre hace referencia a su cilindrada (1.000 c.c.) y SP es el acrónimo de Sport Prototipo; ya que solo se construyeron pocas unidades para ser usadas exclusivamente en competencias entre 1966 y 1971.
El conjunto se compone de un chasis tubular de acero y una carrocería de líneas aerodinámicas, hecha de fibra de vidrio y Perspex. A ello se suma un motor de cuatro cilindros y doble árbol de levas, con carburadores Weber 40 DCOE. Gracias a su bajo peso y una caja manual de cinco cambios, podía alcanzar 230 km/h.
De tal forma que esta barchetta cumplía con las regulaciones del Grupo 6 de la FIA, de prototipos hasta de 1.000 c.c. Esto le permitió participar con éxito en carreras de hill climb y en pruebas de resistencia en varios circuitos; como Nürburgring, Mugello, Vallelunga, Monza y Targa Florio, logrando varias victorias en su clase.
Volviendo al presente, la reinterpretación moderna del Abarth 1000 SP respeta los tres principios de diseño fundamentales del original: ligereza, aerodinámica y manejo ágil. Incluso, reinterpreta de forma fiel las proporciones del auto; junto con elementos estéticos como faros, stops, tomas de aire y ranuras de ventilación.
Y en vez de una estructura tubular, hay un monocasco híbrido con una celda central en fibra de carbono y otra frontal de aluminio. A ello se suma un motor turbo de cuatro cilindros y 1,75 litros, el cual produce 240 hp de potencia. Esto asegura una óptima relación peso/potencia, aunque la marca no declara ninguna cifra de desempeño.
También tiene un esquema de suspensión moderno, con triángulos adelante y McPherson atrás; junto con unos rines ya empleados en los Abarth 500. Por lo demás, el aspecto del nuevo 1000 SP reproduce fielmente el auto de los 60; incluido el tono de pintura roja y la inscripción lateral con el nombre del modelo.
Según explica Stellantis, propietaria de Abarth, esta propuesta se quedará en una única unidad que la compañía utilizará en distintos eventos dedicados a los carros históricos; los cuales se han convertido en una plataforma ideal para exhibir este tipo de conceptos neo-retro. Todo apunta a que no pasará a producción masiva.
- Imágenes del Abarth 1000 SP.